domingo, 12 de diciembre de 2010

48 4.000 Islas


A primera hora de la mañana pasamos el puente, no era de la amistad, pero podría serlo perfectamente ya que es igual de grande y con el mismo diseño y construcción. Ya lo habíamos visto hacía dos noches remando a oscuras y gozado de alegría tras divisar las luces que lo iluminaban, con lo que esta vez no lo cruzamos con tanta pasión, pero nos estamos aficionando a los puentes. Ya llevamos 4 puentes desde China, dos de la amistad y uno en construcción no contabilizado.


Salimos bastante tarde, sobre las 9:00, con lo que nada mas empezar a remar, ya estábamos sudando. Nos lo tomamos con calma, por que tan solo serían unos 25Km hasta Champasak, donde nos alojaríamos de nuevo en una guest house y dormir en camita dos días seguidos!
El echo de saber que son pocos kilómetros los que teníamos que hacer y haber salido tarde, con toda la solana, hizo que estuviéramos un poco perezosos. Pero poco a poco al final, llegamos al embarcadero, donde llegan los transbordadores con los coches, motos y pasajeros que quieren llegar a este pueblo, desde el otro lado de la orilla.


No me acordaba bien de cómo era el sitio donde me alojé hacía un par de años, con lo que tres veces tuve que subir a mirar si era la guest house a orillas del río que yo quería. Por fin, a la tercera va la vencida, la encontré. El dueño seguía estando tan loco como siempre y sin parar de reírse por nada constantemente. Seguía siendo muy barata la habitación y también la comida, con lo que disfrutamos del resto de la tarde escribiendo y leyendo un poco en la terraza a orillas del río.
Por la mañana prontito, nos despertamos para preparar todo y desayunar en cuanto abrieran la cocina. Despertarse tan pronto en aquel lugar, tuvo su recompensa, ya que pudimos ver, cómo los pescadores registran las redes colocadas estratégicamente en las zonas con mas corriente e iluminados por los primeros rayos del astro rey.


Estábamos cerca de la zona conocida como las 4.000 Islas del Mekong, debido a la multitud de islas que se encuentran en esta zona. También en esta zona hay unas cuantas cascadas, mejor dicho, cataratas, con lo que teníamos intención de tomar un bote o algún otro transporte hasta allí. Pero el tipo de la guest house nos dijo que hasta Don Khong, no teníamos problema, que luego era cuando aparecían la multitud de islas e islotes donde es muy fácil perderse y ser conducido hasta una de las cataratas.
De modo que nos esperaban dos días de paleo hasta llegar a la isla mas turística y grande de esta zona, Don Khong, donde una vez allí tomaríamos un bote hasta Don Det, que es la isla donde queríamos llegar.
Llevamos mucho tiempo en Laos y las 4.000 islas hacen frontera con Camboya. De modo que esta zona se había convertido como en un punto clave en este periplo de la piragua. Uno, porque significaba pasar a otro país y dos, porque estaríamos bastante cerca de la desembocadura, bueno bastante cerca, unos 600Km, que son unos cuantos todavía! Con lo que como siempre suele pasar cuando ves cercano el fin de algo, nos costó bastante palear este día. Además las aguas estaban estancadísimas, parecía que estuviéramos en un lago, por la tranquilidad de sus aguas y por la envergadura que adquiera aquí el río, con lo que costaba aún mas.
Esa misma tarde, ya empezamos a ver bastantes islitas, alguna de las cuales era bastante grande e incluso habitada. De echo, gracias a ello, unos niños y niñas que estaban en la escuela, salieron a la orilla tras nuestra aparición para saludarnos, lo cual nos dio las suficientes fuerzas para continuar un poco mas.


Estas pequeñas islitas, tienen un punto extra, que diferencian al resto de las playitas en las que hemos acampado y parado a tomar el tentempié. Tienen una especie de manto vegetal increíble! Parece que estemos tomando el bocata en el green del mejor campo de golf inglés.


Por fin hicimos los kilómetros que habíamos previsto para ese día y comenzamos a buscar el mejor sitio para acampar. Lo bueno de haber tantas islitas es que la abundancia de playas es mayor y tenemos mas donde elegir. Nos decidimos por un sitio elevado, donde mitigar un poco la humedad procedente del río y con abundancia de madera para poder hacer unas brasas buenas para una merecida cena. Un atardecer espectacular hizo el resto, para culminar de la mejor manera la jornada.


Al día siguiente, supuestamente tendríamos pocos kilómetros hasta el empiece de la isla. Sobre las 12 del mediodía llegamos a ella y aprovechamos para tomar unos noodels en las cercanías de un templo. Allí preguntamos por un bote para llegar a Don Det, pero nos dijeron que quedaba muy lejos. Nos dijeron que tendríamos que tomar un tuc tuc que nos llevara hasta el extremo sur de la isla donde salen los botes a esta pequeña isla. Como era pronto, decidimos ir tirando poco a poco hasta llegar a este extremo de la isla.
A las 14:15, llegamos a una zona donde había numerosos botes. Paramos para tomar el último bocata y preguntar si nos acercaban a la isla. Nos dijeron que si nos llevaban, pero nos pedían 40$, con lo que nos montamos en las piraguas y continuamos mas adelante, pues todavía no estábamos en el pueblo del sur de donde salían los botes.
Supuestamente este sitio, en el sur de la isla, se encontraba a unos 5Km de la última parada, pero tras 2h de paleo, todavía seguíamos viendo mas isla en el horizonte. Ya era hora de empezar a buscar zona para acampar, pero el GPS marcaba tan sólo 10Km hasta el punto que había tomado en julio desde esa misma isla. De modo que decidimos jugárnosla a tratar de llegar por nuestra cuenta a la isla.
No sabemos en qué momento, dejamos la isla grande, porque según el GPS ya no estábamos junto a la costa de Don Khong. Se conoce que nos pasamos de largo alguna pequeña entrada del río cubierta por la vegetación. Entramos en una zona donde numerosas islitas empezaban a desorientarnos. Cuando entramos otra vez en una zona donde se podía navegar sin problemas, el rumbo que estábamos siguiendo, no era el correcto. Estábamos un pelín perdidos y encima con el temor de saber que por esa zona hay numerosas cataratas. Todavía no estábamos cerca de ellas, pero un poco desorientados si que si y además atardeciendo.
Llegamos a otro tramo de numerosas islitas. Aquí tratamos de ir por la zona mas a la izquierda, pues por allí se encontraba la isla. Entre unos árboles, vimos que había un pescador con su bote. Le preguntamos por donde se encontraba la isla y nos señaló por donde tratábamos de ir. Viendo la multitud de recovecos que había, le pedimos que nos llevara. No puso ninguna pega y en cuanto terminó de poner las redes, junto con su hijo, nos ató las piraguas al bote, arrancó y nos pusimos afortunadamente en buenas manos, rumbo a Don Det!
Pues menos mal que nos llevó aquel buen hombre, ya que si nosotros, por nuestra cuenta e intuición tuviéramos que haber encontrado la salida, todavía estaríamos allí ahora mismo tratando de salir.


Enormemente agradecemos a aquel pescador que nos sacara de allí!!


Imposible haber llegado de día por nuestra cuenta, ya que con el bote, aún así llegamos casi oscurecido del todo. Pero que bonita estampa, la que nos dejó aquel atardecer, con la estela del bote en el agua rojiza por los últimos rayos del sol y las islas y árboles sombreados por el último toque de luz del anaranjado sol.


PRECIOSOOOO SUNSET!!


A oscuras llegamos a la guest house, en la que por tercera vez me alojo y bajo sorpresa de la dueña, quien pensaba que era mentira, cuando en julio, le dije que volvería en piragua a dormir en sus bungalows.

1 comentario:

  1. AUPA ESE TIO AHI!!!A NOSOTROS SE NOS ACABARON YA LAS VACATAS Y AKI ANDAMOS CURRANDO CON MÁS FRIO QUE ALICATANDO IGLÚS....QUE ENVIDIA DAS CABRÓN!...

    BUENO, YA SABES QUE AKI TIENES DOS NUEVOS SEGUIDORES DE TUS PERIPECIAS....ES QUE DESPUES DE LA TURRA QUE NOS DISTE EN PAKSE...JEJEJE!

    JAVI TA IRATI.

    PD. DILE AL AGARRAO DEL ITALIANO QUE YA LE VALE EH!?

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